De liso a arrugado
La piel envejece debido a factores endógenos y exógenos
Bebés, adolescentes, ancianos: la edad más o menos "madura" de una persona está ante los ojos de todos. A lo largo de la vida, la piel tiende a secarse y afinarse, aparecen arrugas en la superficie y el tono y la elasticidad disminuyen.

Alteraciones endógenas
Por un lado, el envejecimiento de la piel es decretado por procesos moleculares - desgraciadamente imparables - que tienen lugar dentro del cuerpo. A medida que el metabolismo se desacelera gradualmente a lo largo de los años, los mecanismos de regeneración de la piel terminan por estancarse. Las influencias nocivas, como los compuestos químicos agresivos conocidos como "radicales libres", ya no se rechazan de manera eficiente. Incluso los factores exógenos dejan marcas indelebles en la superficie de la piel: es el caso de la mímica facial, con la consiguiente formación de líneas de expresión. Finalmente hay humo, un acelerador muy fuerte del envejecimiento de la piel.

El verdadero elixir de belleza es un estilo de vida saludable
Por otro lado, sin embargo, hay varios trucos y consejos para ayudar a la piel a mantener una apariencia juvenil por más tiempo:
- dormir lo suficiente
- seguir una dieta saludable
- practicar regularmente la actividad fisica
- protegerse adecuadamente del sol
- evitar el consumo de tabaco
Más allá de las estratagemas, el proceso de envejecimiento no puede detenerse. A la larga, los cosméticos y los tratamientos médicos (láser, peelings químicos, inyecciones, etc.) también pierden su eficacia: lo mejor que pueden hacer es ocultar - con resultados más o menos visibles - los signos externos del envejecimiento de la piel.